El intestino, nuestro segundo sistema de defensa.
El estrés del día a día, la alimentación, el cambio climático, la contaminación ambiental y nuestra salud emocional juegan un rol fundamental en la eficacia de nuestro sistema inmunitario.
Cada vez más se está investigando acerca de la importancia que tiene nuestra microbiota intestinal ( esto es, conjunto de bacterias que habitan en nuestro intestino) en la regulación del sistema inmunitario mediante procesos inflamatorios. Aunque dichos mecanismos no son bien conocidos todavía, parecen ser determinantes en la aparición de alergias e intolerancias no solo alimentarias, sino de otro tipo de origen como puede ser el dérmico.
Y es que, cada vez es más frecuente sobre todo en la población juvenil como adolescentes, universitarios y trabajadores jóvenes, la aparición de este tipo de patologías gastrointestinales como el síndrome del colon irritable, la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn que hace unos 50 años casi ni se diagnosticaban.
Por otra parte, el uso abusivo y mal gestionado de antibióticos es muy importante a la hora de alterar el equilibrio de nuestra microbiota intestinal, por diversas razones:
- Destrucción de flora beneficiosa favoreciendo desequilibrios.
- Aparición de cepas patógenas resistentes a antibióticos de uso rutinario.
- Efectos secundarios a nivel hepático de muchos antibióticos.
- Irritación permanente de las mucosas generando problemas de malabsorción.
Los expertos recomiendan como pauta principal el cambio de dieta, introduciendo alimentos con alto contenido en fibra ( cereales, pan integral, alcachofa, brócoli) así como ácidos grasos poliinsaturados ( frutos secos, pescado azul, mariscos, soja..) cuya fermentación favorece la formación de fibras y cuyo efecto es antioxidante.
El uso de prebióticos, es decir, alimentos que favorezcan la regeneración de la flora intestinal como el kéfir, la kombucha o los yogures con alto contenido en bidifus son esenciales para mantener nuestra salud intestinal.
En resumen, es importante cuidar nuestro intestino para no caer en infecciones y alteraciones digestivas importantes.